El pasado domingo, 21 de mayo, celebramos el fin
de curso en un entorno tan extraordinario e incomparable como es el Santuario
de Santa Casilda, lugar de tradición, lleno de simbolismo y tan querido por
todos los burgaleses, especialmente los burebanos.
En
primer lugar, agradecer con todo cariño y felicitar el buen trabajo, el tiempo
y la dedicación que el Grupo de Acontecimientos ha dedicado en organizarnos tan
maravilloso día. Mi más sincera Enhorabuena a Ana Neila, Lita Pérez, Beatriz
Gutiérrez y a Ángel Luis Casado. Sin vosotros no hubiera sido posible. Mil
Gracias. Todo ha estado muy bien organizado, con todo detalle. Como ya sabéis
la Comunidad de Briviesca tan atenta y generosa como siempre, María Jesús
dispuesta y pendiente de todo. También a ella, darle las gracias por saber
ayudar y hacernos compartir un agradable día.
Desgraciadamente este año por diversas circunstancias, me perdí el viaje en el autobús, que tuvo que ser muy divertido, alegre y jovial, al menos dieron muestra de ello, nada más llegar la expedición burgalesa junto a los briviescanos, entonaron con fuerza el DE COLORES, enarbolando la Bandera Española, con nuestra Catedral de Burgos, que pinto tan bonita, Lamberto con motivo de la V ULTREYA MUNDIAL DE FÁTIMA. Muchas gracias también por su labor artística y generosidad.
¡ASÍ DE TRIUNFALES ENTRAMOS EN EL SANTUARIO!
Comenzamos
el día compartiendo la experiencia de los peregrinos a la V ULTREYA MUNDIAL DE
FÁTIMA, que realizaron los días 4 al 7 de mayo. Oyéndoles se sentía “envidia sana”, y nos hicieron vivir y
compartir su vivencia de esos días en el Santuario de Fátima. Estuvo bien,
porque nos hablaron varios cursillistas, unos veteranos como Carmen Franco y
Jesús. Otro muy reciente como Juan Cruz. Y también otra chica, Cristina que
este fin de semana va a hacer el Cursillo 236. Se hizo corto y hubiéramos
necesitado más tiempo.
A
continuación, la Eucaristía en ese entorno tan maravilloso, enigmático y
especial. La Iglesia estaba llena. Presidida por D. Félix Castro y concelebrada
por nuestro querido Consiliario Emérito D. Sebastián Marroquín estuvo preciosa.
A D. Félix se le notaba feliz de poder compartirlo con nosotros, porque él también
ha hecho el Cursillo, algunos años atrás, y sus padres y hermana también son
Cursillistas, así que se sintió como uno más. Si que os tengo que decir que él
día que hablé con él, para decirle que queríamos celebrar en el Santuario, el
fin de curso, me dijo: “El mejor regalo
que me podías hacer hoy, es decirme eso”. Se puso muy contento. Y el domingo me lo
reitero. Particularmente a mi la Homilía me gustó mucho, fue muy de Cursillos,
porque nos alentó a que estuviéramos alegres, que tenemos que tener muy
presente el que Jesús está vivo y junto a nosotros. Tuvo el detalle de encender
el Cirio Pascual, reviviendo la Resurrección de Jesús. ¡QUÉ ES EL MEJOR REGALO!
Y que no nos lo podemos quedar egoístamente sino que lo tenemos que Anunciar a
los demás Fue una celebración muy participativa de toda la Comunidad, emotiva y
de verdadera Comunión. Se palpaba la emoción.
Posteriormente,
la comida fraterna, a la que asistió D. Julián Galeón Cuesta, sacerdote de
Briviesca, agradecemos su presencia. Nos reunimos una buena y numerosa
representación de Cursillistas, estuvimos muy bien servidos, la comida
exquisita y mejor aún la compañía. En el ambiente se respiraba Amistad,
Alegría, Paz y verdadera Unión.
Es
bonito y gratificante poder compartir un fin de curso en el que intentamos
llevar con nosotros nuestro Carisma.
Mil
Gracias a todos por hacerlo posible, cada uno tenemos una misión, unos dones y
valores para realizarlo. Somos miembros de UNA GRAN FAMLIA DE COLORES. Que si
Dios quiere irá creciendo.
Muchos
Besos.
DE
COLORES
Mar Ruiz de Velasco
Presidenta MCC Burgos
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